Hace 10.000 años, durante la Revolución Agrícola, algunas ciudades asentadas alrededor de los ríos Nilo, Éufrates e Indo comenzaron a construir muros para protegerse de los enemigos. Fue aquí donde aparecieron los primeros “ingenieros”.
En la arquitectura egipcia
destacó Kanofer, que diseñó el muro de la ciudad de Menfis. Su hijo, Imhotep,
es considerado el primer ingeniero conocido. Él y sus sucesores fueron los que
emplearon la geometría, la aritmética y la física por primera vez para
construir templos y pirámides.
Fue en el s.V a.C. cuando unos
arquitectos al mando de Pendes, crearon una serie de templos en la Acrópolis,
un monte cercano a Atenas. Emplearon por primera vez el hierro forjado para
reforzar las vigas de mármol. Además de Pendes, podemos destacar ingenieros
como Dinócrates, Arquímedes o Sostratus.
Sin embargo, los mejores
ingenieros de la antigüedad no llegaron hasta el s.III a.C., con el Imperio
Romano. Hicieron grandes avances en la ingeniería civil: acueductos,
carreteras, puentes, edificios públicos,… Estas obras se caracterizaban por ser
poco originales, pero muy prácticas.
En la Edad Media, los avances en
la ingeniería tuvieron lugar mayoritariamente en Oriente. La India se consagró
como el principal centro siderúrgico. En China, se modificó varias veces la
Gran Muralla China, la cual acabó de ser construida en el s. XVI, con la
dinastía Ming.
Tras la Caída de Constantinopla,
comenzó una nueva etapa: el Renacimiento. En el s.XVI, hubo grandes avances
científicos. Como consecuencia, la ingeniería también avanzó, en parte gracias
al mejor ingeniero de la historia, Leonardo Da Vinci. Da Vinci no inventó
muchas cosas, pero varios inventos posteriores fueron ayudados por sus diseños:
el helicóptero, la turbina de gas, la ametralladora, la cámara,…
En la Revolución Industrial,
destacaron dos hombres: James Watt y Henry Cort. Watt creó la máquina de vapor,
que luego aplicaría Stephenson a los ferrocarriles; Cort aportó su innovador
método para refinar el hierro.
En la actualidad, la ingeniería electrónica se ha
desarrollado a gran velocidad. Los ingenieros electrónicos buscan hacer los
aparatos electrónicos cada vez más pequeños, y ahora existe una “ingeniería
microelectrónica”.
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